Actualmente, Aldo Lagrutta divide
su tiempo entre el concertismo, grabaciones clásicas y como capacitador y entrenador de la
Transposición Cibernética. Sus más de treinta años de dedicación a la búsqueda y aprendizaje de las secretas
técnicas para el control de la mente y sus tendencias en la tradición del Yoga lo condujo a ordenarse como un Rajadhiraj Yoga
Acharya (aquél que enseña con su propio ejemplo), y es uno de los pocos occidentales autorizado para enseñar tanto Sahaja
Yoga, como el dificil y hermético Vishesha Yoga a calificados aspirantes.